martes, 12 de mayo de 2015

Cariño, ¿dónde está mi capa?



Si las madres no somos Superwoman es porque nos falta la capa... Hoy no me tocaba escribir pero tengo que confesar algo: cada día me sorprendo más a mi misma. Anoche me acosté a las mil, no porque me fuera de fiesta ni porque mi niña pidiera guerra, simplemente preparando el papeleo del nuevo curso de español, que si mis alumnos aprendieran el equivalente a todos los papeles que tengo que rellenar, le echaban un pulso a Cervantes.

Esta mañana, tras levantarme ojerosa me iba arrastrando por los rincones porque después de acostarme a las 2.30 mi niña se levantó una hora después para venirse a la cama, y a las 4 de la mañana pidiendo leche, no tetita, no; que es fácil y rápida, "cow" me decía... Lo que viene siendo leche de la vaca, así que me toco bajar a la cocina. Con dolor de cabeza como si tuviera resaca, por la mañana me he remangado para hacer el desayuno, luego hemos jugado un poco, he atendido un par de llamadas de teléfono y he dejado hechas unas lentejas y el relleno de una lasaña vegetal. También he puesto una lavadora y he preparado el almuerzo de mi hija. Nada que las demás madres no sepan, esto es pura rutina. Mientras ella sola se zampaba su comida yo tenía planeado darme una ducha... pero cuando miro el reloj eran las 12.30pm. A la 1 teníamos que estar en la parada para coger el bus de camino a la guardería.

¡Aquí viene la hazaña! Mientras contestaba a unos whatsapp me iba colocando las lentillas, a las 12.37 me metí en la ducha, nada de un enjuague con jabón porque me lavé hasta el pelo, salí y me sequé rápido, me pinté un poco para disimular las ojeras, me vestí con lo primero que pillé, sequé el pelo con una toalla para no llevarlo chorreando, le cambié el pañal a la peque, nos pusimos los zapatos, salimos corriendo a la parada y hemos cogido el bus de en punto. Si eso no es de Superwoman, Supermamá o como queráis llamar a los ultrapoderes que te salen cuando te conviertes en madre que alguien venga y me lo explique. 

¡¡Sólo 23 minutos de reloj para todo eso!! Supongo que habrá mamis que me superen, pero como marca personal me parece imbatible... Y prometo que me he frotado tras las orejas :-) Antiguamente, cuando vivía para mi y sólo para mi, ese era el tiempo que tardaba solo en la ducha si tenía que lavarme la cabeza; porque con los rizos, el desenredo lo hago con suavizante y bajo el agua. Y al llegar a la parada todavía nos han sobrado 30 segundos para recuperar el aliento tras la carrera con la niña en brazos, que después de dos minutos de sprint, la falta de entrenamiento, y la edad que no perdona, mis pulmones lo notan. No me digáis que no es digno de capa. ¿Y vosotros? ¿Cuáles son vuestros suerpoderes?

No hay comentarios:

Publicar un comentario